En estos días estamos viviendo los vecinos de SFVC un sueño que se parece más a una pesadilla. Nos referimos a la aparición del dengue. Cualquier vecino de la ciudad, sin distinción alguna de niveles socio-económicos, es vulnerable a esta realidad que vivimos.
Esto trajo aparejado, además, una drástica disminución en el turismo urbano. Algo que perjudica enormemente a la ciudad, ya que esta actividad productiva es vital para la economía de SFVC. Lo vemos reflejado en la prensa internacional, que habla de la instalación del dengue en Argentina y el consejo que dan a los posibles visitantes a nuestras tierras de no viajar y en caso que sea necesario, tomar los recaudos pertinentes.
El Dr. José Luis San Martín –asesor Regional de Dengue, de la Organización Panamericana de la Salud– de visita por nuestra provincia, con la Ministra de Salud de la Nación, explicó que «es imposible que una estrategia de control se base en intentar sólo eliminar el mosquito adulto con la fumigación. Esto el vecino tiene que entenderlo. La solución está en eliminar los criaderos, las chatarras, los recipientes que acumulan agua, porque mientras más tiempo dure el vector más empeñamos el futuro, porque el otro brote que llegue no será clásico. Pero también hay que advertir que el control de la fumigación debe tenerlo el Estado, no puede contratarlo cualquier vecino», advirtió el profesional.
Además expreso: «Eliminar totalmente el mosquito puede ser un sueño, porque está relacionado con la infraestructura, la condición económica y social. El nivel de desarrollo de nuestras ciudades en América Latina, cinturones de pobreza extrema, son de provecho del vector para encontrar criaderos»
Además el asesor de OPS aclaró que: “el Aedes Aegypti es un mosquito de vida domiciliaria, relacionado enteramente con el ordenamiento ambiental de la vivienda. Yo puedo tener la casa limpia, pero sin embargo el mosquito vive en agua limpia, y es muy frecuente que tengamos depósitos de agua que él está utilizando para criarse. Los principales focos positivos de transmisión de Aedes están en tachos de mascotas, por lo que tenemos que cambiar el agua diariamente para que no se reproduzca el mosquito»
Explicó que «luego de que el mosquito pone sus huevos, deben pasar un mínimo de siete días para que llegue a adulto, por eso hay que atacarlo cuando es más vulnerable, cuando es larva, esta es una acción que nosotros individualmente podemos tomar”
Nuestra gente opina
En el programa de radio “a vos, ciudad” de Radio Unión, hemos tratado el tema invitando a la doctora Graciela Avellaneda, Directora de Chagas y otros Vectores, dependiente de la Subsecretaria de Promoción y Prevención del Ministerio de Salud de la Provincia de Catamarca.
La profesional nos dejo en claro que si la población participa, podremos controlar la enfermedad: “todos debemos aprender a cuidarnos. Estos mosquitos buscan lugares donde hay gente, ya que la hembra necesita para sus huevos sangre. Por eso vive en ciudades. Hay que limpiar las casas, seguir luego con la limpieza de los barrios, todo esto enmarcado en una intensa actividad comunitaria”
La dirigente barrial Angélica Rebolledo –quien está trabajando activamente desde hace algunos años en la urbanización del Barrio Santa Marta en la zona sur de SFVC– de visita también por la radio, dijo que: “hay que coordinar las acciones entre los barrios. Cuando la gente comienza a sacar la basura y no pasan a recolectarla, no se dan cuenta que en vez de tener el dengue en la casa lo llevan a la vereda”
La dirigente continuó con las siguientes reflexiones: “A los vecinos hay que darles charlas, ya que no saben cómo se reproduce el mosquito, no toman conciencia de la rapidez con que lo hace. Desde el Gobierno tendrían que pensar en planificar el trabajo de manera intensiva en dos o tres barrios por semana”
Angélica sostiene que “no sacamos nada repartiendo folletos. Hay gente que no sabe leer… que sólo entienden los dibujos. No deben ser tan técnicos para hacer las cosas. Tienen que sumar al vecino, no al funcionario. Llamemos y sumemos a los centros vecinales… Es lo que menos han hecho los funcionarios”
Ya en el final del reportaje casi como una súplica pidió: “sumémonos. Hay decenas de centros vecinales y ONG dispuestos a trabajar. El vecino quiere que lo tengan en cuenta, el vecino va a colaborar…”
Mientras escribía esta nota, recordaba una película que vi una vez, ambientada a finales del siglo XVII en la ciudad de Ámsterdam, en la que se podía ver cómo los vecinos arrojaban sus heces a los canales, desde las ventanas de las casas. Inmediatamente, en otra escena del film, se veía a otros vecinos que recogían agua del mismo canal. Después de mucho tiempo –en el que se sucedieron terribles enfermedades– estos vecinos comprendieron que en ese canal estaba la vida y la muerte. Entendieron que debían mantenerlo limpio. Si ellos pudieron hacerlo y hoy constituyen una sociedad desarrollada… ¿cómo no podemos lograrlo nosotros también? Si emprendemos coordinadamente –vecinos y Estado– una intensa actividad comunitaria, seguramente podremos vencer al dengue.